martes, 28 de septiembre de 2010

PEDIDOS FÍSICOS

Lugares donde puedes conseguir "Lo que vino de las profundidades":

LIBRERÍA OPAR

C/ GOYA Nº 99, Esc. C, 2º, D
28009 (MADRID)
Tlf. 91 575 45 20
oparlibreria@yahoo.es

IMPRENTA SAMUEL
C/ GENERAL DÁVILA 2, 02630

La Roda (ALBACETE)
Tlf. 967 440 087
graficassamuel@telefonica.net


LIBRERÍA HERSO
C/Dionisio Guardiola 18
02001 ALBACETE
Tlf. 967 50 71 57
herso@herso.com

LIBRERÍA SIMÓN
C/Ave María, 1
24400 PONFERRADA, LEÓN
Tlf. 987 41 08 06

LIBRERÍA POPULAR
C/Octavio Cuartero 17
02003, ALBACETE
Tlf. 967 22 58 63
popular@futurnet.es

LIBRERÍA ELEKTRA
C/ Comandante Zorita 4
24004 LEÓN
Tlf. 987 072 132
elektraleon@gmail.com

ALMANSEÑA DEL LIBRO S. L.
Rambla de la Mancha, 36-44, local 39
02640
ALMANSA (ALBACETE)
Tlf. 967 311 099
libros_10@wanadoo.es

LIBRERÍA ZORRILLA
Plaza del Cristo, 6
24400 PONFERRADA, LEÓN
Tlf.987 41 08 05

LIBRERÍA IBROX
C/ Marqués De Murrieta, 6
26005 LOGROÑO
941 223 064
http://www.ibrox.es/


LIBRERÍA SHOGUN
C/Padilleros, 11 bajo
37002 SALAMANCA
923 215 302
http://www.shogunsalamanca.net/

NOVEDADES FENIX
Librería-Papelería-Prensa-Modelismo
C/ Marcelo Usera, 91
28026 MADRID
Tf: 91 475 74 77

¿CÓMO CONSEGUIR "LO QUE VINO DE LAS PROFUNDIDADES"?


PRESENTACIÓN de LO QUE VINO DE LAS PROFUNDIDADES en ALBACETE


El próximo jueves 14 de octubre de 2010 a las 19:30 horas, se presentará el libro LO QUE VINO DE LAS PROFUNDIDADES, Siete cuentos de terror, de Eduardo Moreno Alarcón.
El acto tendrá lugar en el Salón de Actos de la Biblioteca Pública San José de Calasanz (Ubicada en C/San José de Calasanz, 14, Albacete)


Contará con la presencia de Juan Antonio Prieto, coordinador del club de lectura "el grito".

Estais invitados, os esperamos.

www.bibliotecaspublicas.es/albacete

jueves, 23 de septiembre de 2010

LA CARA OCULTA DE W.W. JACOBS


Al igual que ocurriera con el célebre Drácula de Stoker, el cuento La pata de mono parece haber eclipsado el resto de la obra de William Wymark Jacobs. Y es que no hay antología —que se precie— de relatos de terror que no incluya esta pieza maestra del escritor inglés.

Adentrarse en las narraciones de Jacobs es un ejercicio tan recomendable como fascinante. Se trata, en mi opinión, de uno de los grandes maestros del relato breve. De estilo ágil, directo y cautivador, su manejo de la prosa resulta brillante y eficaz. La forma de abordar los registros de una mente atormentada por la obsesión, el remordimiento, las premoniciones más oscuras y el consecuente destino trágico, es absolutamente soberbia. Inocula el miedo en el lector como un veneno letal, haciéndolo además desde lo cotidiano, transformando la realidad que percibe la agitada mente del protagonista, que es, en definitiva, quien crea, cuenta o describe la situación inquietante. Ejemplos de su talento son Cuidando al prójimo o La interrupción.

Sin embargo, hubieron de pasar años para que este funcionario de correos —escritor de vocación—, fuera descubierto y comenzara a publicar en la prestigiosa revista The Strand Magazine (la misma que diera a conocer a Conan Doyle). A partir de ahí, su carrera literaria despegó, alcanzando un éxito notable. Tanto es así que llegó a ser considerado el mejor escritor de humor en lengua inglesa de su tiempo. Curiosamente esta faceta —la del humor—, permanece hoy prácticamente olvidada.

Especial mención merecen sus relatos de terror ambientados en el mar. No en vano, su padre fue administrador de un puerto y, desde pequeño, el mundo marino impregnó el alma del joven William. Cuentos como El barco desaparecido, con escenas sobrecogedoras, o Apareció por la borda, que recrea una atmósfera propia de su compatriota Hodgson, son muestra de la mejor escuela literaria que haya dado la vieja Inglaterra.

Ya lo saben. Es hora de quitar el velo y descubrir lo que se esconde tras La pata de mono. Pero ándense con cuidado. Quedan advertidos.

 

martes, 21 de septiembre de 2010

PRESENTACIÓN de LO QUE VINO DE LAS PROFUNDIDADES en La Roda

El pasado 18 de septiembre, se presentó en el auditorio de la casa de la cultura de La Roda (Albacete), el libro LO QUE VINO DE LAS PROFUNDIDADES, Siete cuentos de terror.
Fue un día lleno de emoción e intensidad. Desde aquí, gracias a todos los asistentes a este acto tan especial para mí, pues supone tanto la culminación de un largo esfuerzo, como el inicio de un camino literario que espero sea fructífero.
Vaya por delante el reconocimiento más sincero a mis compañeros de viaje: Pedro Manuel Víllora, Antonio González, Francisco Luján, Pablo Gómez, Gabriel Rodríguez, Pedro Pastor y Emma González.
Sin duda, me quedo con el cariño recibido, antes, durante y después de la presentación. Guardaré este acto en la memoria como uno de los momentos más inolvidables de mi vida.



lunes, 6 de septiembre de 2010

RETRATOS DE LO MACABRO, o el lienzo de MAUPASSANT


Uno de los casos más singulares en la historia de las letras, es el del francés Guy de Maupassant. Seguramente ningún otro escritor haya tenido padrinos más notables: nada menos que Flaubert y Zola: Realismo y Naturalismo elevados a la máxima potencia. Una combinación portentosa que, unida al talento del galo, dio como fruto una obra literaria prodigiosa (más de 300 cuentos y siete novelas).

Su guía y maestro Gustave Flaubert, embebido del romanticismo que envolvía la Europa de principios del XIX, escribió entre 1835—1839 varios cuentos en los que mostraba su fascinación por lo horrible y los aspectos más negros, crueles y aborrecibles de la existencia del hombre (la muerte, la locura, la desesperación, la embriaguez…) En su célebre ensayo El horror en la literatura, H. P. Lovecraft refiere a propósito de Flaubert: “De no ser por su tendencia marcadamente realista, podría haber sido un consumado maestro del terror”. De hecho, una frase que repetía con frecuencia al joven Guy era: “La realidad, siempre la realidad”.

Junto al creador de Madame Bovary, Maupassant aprende el valor del esfuerzo, la observación y la lucidez, así como la importancia de la documentación. Por otra parte, del Naturalismo de Émile Zola, tomará la idea de que las raíces del mal se localizan en la condición humana.

Sin embargo, la vida de Maupassant dista mucho de la disciplina y el rigor que mostró en los valores literarios. Ante todo fue un vividor —en el mejor sentido de la palabra—. Apasionado del ejercicio físico (como otros grandes, Hodgson o Robert E. Howard), y sobre todo, del sexo femenino. Amó de forma compulsiva y jamás se implicó emocionalmente. Baste decir que incluso presidió una “sociedad de chulos”. Los amores fáciles se convirtieron en su pasión favorita, siendo el origen de la sífilis que marcó el resto de su vida.

Diez años transcurrieron desde entonces hasta su muerte en 1893. Diez años en los que escribe de manera frenética, en medio de terribles sufrimientos físicos causados por la enfermedad y que lo llevarían finalmente a la locura. Las alteraciones nerviosas determinaron sin duda su visión del ser humano. El propio Lovecraft califica sus creaciones como “efusiones morbosas de un cerebro realista en estado patológico”. Y más adelante añade:”Sin embargo, poseen el más vivo interés e intensidad, y sugieren con fuerza maravillosa la inminencia de unos terrores indecibles”.

Siempre recuerdo con estremecimiento —me atrevo a decir placentero— dos pasajes de sus relatos La confesión y Moiron que, para mí, alcanzan la cima del cuento de carácter macabro o espeluznante.

A veces, temo que acabe por cumplirse el vaticinio que apuntó Maupassant en un artículo titulado “Lo fantástico”, publicado en 1883, y en el que expresaba lo siguiente:

“Nuestros nietos nunca sabrán lo que era en el pasado la noche, el miedo a lo misterioso, el miedo a lo sobrenatural”


Ojalá la profecía del genio nunca se cumpla.